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Es día de primeras impresiones. John Van't Schip entra al vestidor del
estadio Omnilife, donde ya lo espera el plantel de Chivas. Ha hecho su
tarea: conoce a cada uno y los saluda por su nombre. Algunas veces habla
en español, otras en inglés. Es el contacto inicial con el que arranca
el compromiso de sentarse en la banca rojiblanca.
Tras el breve encuentro, escoltado siempre por José Luis Real, el holandés aparece en la sala de prensa. Ahí, se muestra honesto. No promete lo que, por ahora, considera no es seguro. Pide paciencia, tanto a la afición como a la directiva, para que los resultados lleguen. Soluciones inmediatas, no trae bajo el brazo.
"El Güero" se encarga de la presentación. Jorge Vergara está de viaje. Cuando Van't Schip toma el micrófono, su primer mensaje es un castellano suficientemente fluido: "Hace 29 años jugué en Guadalajara el Mundial (Sub-20) y me sentí muy orgulloso. Hoy, estoy orgulloso otra vez por estar aquí y comenzar a trabajar en este equipo de rica historia y tradición. Estamos trabajando fuerte para que los jugadores mejoren su desempeño y ser un gran equipo para tener éxito. Muchas gracias".
Enseguida hace la aclaración pertinente. Sólo habla inglés en adelante. El equipo de traducción simultánea se convierte en su aliado. "Lo más importante de momento para mí y el club es tener este proyecto y trabajar arduamente. Sabemos el nivel al que debemos llegar, pero sabemos que las cosas no se dan rápidamente a menos que los jugadores entiendan rápido qué hacer y tener esa conexión necesaria. La paciencia es importante, no va a ser de la noche a la mañana", explica.
En el Guadalajara, sin embargo, ese no es un tema habitual. Con Jorge Vergara han desfilado 15 técnicos en menos de 10 años de administración. Consciente de ello, John Van't Schip ya habló con el propietario de la escuadra tapatía.
"Conozco el hecho de que ha habido una gran cantidad de técnicos, pero también sé que el haber contratado Johan Cruyff como consultor demuestra el nivel de compromiso. Jorge Vergara apoya en su totalidad todo lo aquí visto. Sabemos que se deja llevar por sus emociones y esa pasión que tiene, pero nos hemos comprometido ambas partes para tener un poco más de paciencia. No tengo el menor temor por visualizar lo ocurrido en el pasado, sino que veo el presente, enfocado en el futuro para volver a estar arriba", sentencia.
No será policía
La disciplina, dentro y fuera del terreno de juego, es fundamental en la concepción de juego que tiene el holandés, nacido en Canadá. Sin embargo, advierte desde el principio, que no será un vigilante que esté detrás del futbolista.
Tras el breve encuentro, escoltado siempre por José Luis Real, el holandés aparece en la sala de prensa. Ahí, se muestra honesto. No promete lo que, por ahora, considera no es seguro. Pide paciencia, tanto a la afición como a la directiva, para que los resultados lleguen. Soluciones inmediatas, no trae bajo el brazo.
"El Güero" se encarga de la presentación. Jorge Vergara está de viaje. Cuando Van't Schip toma el micrófono, su primer mensaje es un castellano suficientemente fluido: "Hace 29 años jugué en Guadalajara el Mundial (Sub-20) y me sentí muy orgulloso. Hoy, estoy orgulloso otra vez por estar aquí y comenzar a trabajar en este equipo de rica historia y tradición. Estamos trabajando fuerte para que los jugadores mejoren su desempeño y ser un gran equipo para tener éxito. Muchas gracias".
Enseguida hace la aclaración pertinente. Sólo habla inglés en adelante. El equipo de traducción simultánea se convierte en su aliado. "Lo más importante de momento para mí y el club es tener este proyecto y trabajar arduamente. Sabemos el nivel al que debemos llegar, pero sabemos que las cosas no se dan rápidamente a menos que los jugadores entiendan rápido qué hacer y tener esa conexión necesaria. La paciencia es importante, no va a ser de la noche a la mañana", explica.
En el Guadalajara, sin embargo, ese no es un tema habitual. Con Jorge Vergara han desfilado 15 técnicos en menos de 10 años de administración. Consciente de ello, John Van't Schip ya habló con el propietario de la escuadra tapatía.
"Conozco el hecho de que ha habido una gran cantidad de técnicos, pero también sé que el haber contratado Johan Cruyff como consultor demuestra el nivel de compromiso. Jorge Vergara apoya en su totalidad todo lo aquí visto. Sabemos que se deja llevar por sus emociones y esa pasión que tiene, pero nos hemos comprometido ambas partes para tener un poco más de paciencia. No tengo el menor temor por visualizar lo ocurrido en el pasado, sino que veo el presente, enfocado en el futuro para volver a estar arriba", sentencia.
No será policía
La disciplina, dentro y fuera del terreno de juego, es fundamental en la concepción de juego que tiene el holandés, nacido en Canadá. Sin embargo, advierte desde el principio, que no será un vigilante que esté detrás del futbolista.
"No he venido a alterar la cultura. Tenemos que adaptarnos a la idea del mexicano y su forma de pensar. Si tenemos que cambiar algo (en el reglamento interno) lo haremos después del análisis, con acuerdos que a todos nos dejen contentos. No soy policía para imponer, ellos deben sentirse libres para expresarse lo que piensan en el campo y fuera de él. Si les quitamos esta sensación a los jugadores, no van a tener libertad. Debe haber disciplina y reglas", asevera.
Reitera, más adelante, la necesidad de hacer contrataciones: "Estamos trabajando arduamente en esta tema, sabemos de ciertas posiciones que nos gustaría traer jugadores, pero en este momento no sería oportuno hablar de nombres, pero sí necesitamos reforzar para lograr lo que queremos con Chivas".
Honesto en cada respuesta, reconoce que, aunque en la cancha tomará las decisiones, deberá atender las indicaciones de Cruyff. "Soy el responsable, sin embargo Johan será el consultor oficial del club y obviamente fue quien me convenció de venir. Si hubiera preguntas de mi parte, las formularé. Cuando estuve con Marco van Vasten en la Selección Jolandesa, Johan fue consultor también. No lo veo como que me controle, en un momento si necesito apoyo, me comunicaré con él y si él tiene algo que decir sombre cómo mejorar, lo escucharé y daré seguimiento", admite Van't Schip.
Finalmente, continuando con su discurso en inglés, promete superar pronto la barrera del idioma. "Voy a tener gente como Eduardo (Fentanes) y el profesor José Luis (Real), que me ayudarán para expresar lo que quiero como mensaje a ellos. Pero el futbol tiene un lenguaje internacional. Cuando explique algo más específico, al principio necesitaré apoyo para que la idea sea concisa, pero lo antes posible trataré de hablar de buena forma ara que entiendan mi mensaje", concluye.
Tras la presentación, hace a un lado el saco que porta. Se pone la camiseta del Guadalajara, sin número y con su apellido grabado en la espalda. Lo acompaña su cuerpo técnico: Rob Meppelink, David Nascimento, Eduardo Fentanes y Olaf Heredia (Alberto Coyote es el único ausente). La nueva era del Rebaño Sagrado ha comenzado.
Via | Potencia Deportiva