Autor Este escrito es sobre el clásico regio Tigres vs Monterrey, es un artículo en palabras de la fifa, la referencia aca para que lo puedan revisar o leer los comentarios, les transcribo el artículo.
Cuando en México se habla de clásicos, el primero que viene a la mente es el nacional entre América y Guadalajara. Sin embargo, poca gente afuera del país sabe que hay un enfrentamiento regional que levanta la misma pasión aunque concentrada en una sola ciudad: Monterrey.
En casi toda la República Mexicana, los fanáticos apoyan a su equipo local y a uno de los llamados "cuatro grandes", Pumas, Chivas, América o Cruz Azul. La única excepción es la Sultana del Norte, que se divide, casi al cincuenta por ciento, en aficionados de sus dos equipos, Tigres y Rayados, y que, cuando se enfrentan, paralizan literalmente a la capital del estado de Nuevo León.
Para los aficionados, un triunfo frente al rival de toda la vida muchas veces significa más que la consecución de un título, y una derrota lleva como consecuencia sufrir seis meses de burlas en la escuela, la oficina o incluso la familia por parte de los orgullosos hinchas contrarios.
Los orígenes
Curiosamente, el Clásico Regio, como se le conoce al encuentro, no tiene mucho tiempo de existencia. Durante años, el equipo importante de la ciudad fueron los Rayados del Monterrey, fundados en 1945, y muy cercanos a la más importante universidad privada de la ciudad, el Tecnológico de Monterrey.
Curiosamente, el Clásico Regio, como se le conoce al encuentro, no tiene mucho tiempo de existencia. Durante años, el equipo importante de la ciudad fueron los Rayados del Monterrey, fundados en 1945, y muy cercanos a la más importante universidad privada de la ciudad, el Tecnológico de Monterrey.
El equipo albiazul tuvo rivales eventuales, como los Jabatos de Nuevo León, que duraron sólo unos años en el máximo circuito, pero no vieron sacudida su supremacía sino hasta mediados de los años setenta, cuando el equipo de la universidad pública de la ciudad, los Tigres de la Universidad Autónoma de Nuevo León, consiguieron su acceso a la máxima categoría.
Las condiciones eran perfectas para un gran clásico. Ricos contra pobres, ingenieros contra licenciados, albiazules contra auriazules, e incluso ciudad contra provincia, puesto que el estadio de los Tigres, el Universitario, se ubica en San Nicolás de los Garza, una población en las afueras de Monterrey.
Desde entonces esas separaciones han ido cayendo, y ahora hay aficionados de ambos equipos en todos los estratos y de todas las condiciones sociales. Pero la pasión se mantiene. Los fanáticos cuentan los días antes del juego y la ciudad se vuelve un polvorín cuando ambos se enfrentan.
Algunas cifras
Eso volverá a suceder este sábado, cuando se efectúe la edición 89 del partido más importante de Monterrey. Hasta ahora, los Tigres llevan una pequeña ventaja de 33 triunfos contra 29 éxitos rayados y 25 empates (un partido se suspendió al minuto 7). Una de esas igualadas se presentó en el primer encuentro entre ambos, que también fue el debut de los felinos en la máxima categoría, y que terminó 3-3.
Eso volverá a suceder este sábado, cuando se efectúe la edición 89 del partido más importante de Monterrey. Hasta ahora, los Tigres llevan una pequeña ventaja de 33 triunfos contra 29 éxitos rayados y 25 empates (un partido se suspendió al minuto 7). Una de esas igualadas se presentó en el primer encuentro entre ambos, que también fue el debut de los felinos en la máxima categoría, y que terminó 3-3.
Un dato importante es que, a diferencia de casi todos los partidos que se efectúan en México, en el clásico regiomontano es muy raro ver aficionados de un equipo en el estadio del rival. Esto no es por razones de seguridad (aunque tampoco está de más tener precaución), sino porque son los dos clubes que más abonos de temporada venden al año, y en consecuencia llenan sus tribunas cada quince días con sus apasionados fieles dejando muy poco espacio para las hinchadas rivales.
Anécdotas y frases míticas
"Prefiero ir de compras a Laredo que ver jugar a los Tigres", fue la frase proferida recientemente por el colorido técnico Ricardo La Volpe, pero expresa el sentimiento de la afición de los Rayados por sus "queridos" vecinos. Lamentablemente para el Bigotón, el partido que siguió a sus memorables palabras fue fácilmente ganado por los felinosde su archirrival Manuel Lapuente con un contundente 4-1.
"Prefiero ir de compras a Laredo que ver jugar a los Tigres", fue la frase proferida recientemente por el colorido técnico Ricardo La Volpe, pero expresa el sentimiento de la afición de los Rayados por sus "queridos" vecinos. Lamentablemente para el Bigotón, el partido que siguió a sus memorables palabras fue fácilmente ganado por los felinosde su archirrival Manuel Lapuente con un contundente 4-1.
Pero quizá sea otro partido, con el mismo resultado pero a la inversa, el más importante que han vivido ambos equipos hasta ahora. El 4 de junio de 2003, los dos enemigos se enfrentaban en el partido de ida de las semifinales del torneo Clausura. Ahí, pese a jugar en el Estadio Universitario, los Rayados golearon a los Tigres de la mano de un inspiradísimo Guillermo Franco y dieron un paso definitivo a la final, que terminarían ganando tras una emocionante serie contra el Morelia.
El resultado fue particularmente doloroso para los felinos, que no han dado una vuelta olímpica desde el ya lejano 1982, mientras que sus rivales de ciudad lo han hecho en dos ocasiones en ese mismo período.
Actualmente
Tras varias temporadas decepcionantes, los dos equipos de Nuevo León buscan recuperar el terreno perdido en el Apertura 2009. Los Rayados, dirigidos por Víctor Manuel Vucetich, un viejo lobo de mar, cuentan con uno de los mejores planteles del país, en el que destaca el goleador Humberto Suazo. Tigres, por su parte, está en pleno proceso de renovación, y para eso ha confiado el plantel en Daniel Guzmán, uno de los técnicos más exitosos en los últimos años.
Tras varias temporadas decepcionantes, los dos equipos de Nuevo León buscan recuperar el terreno perdido en el Apertura 2009. Los Rayados, dirigidos por Víctor Manuel Vucetich, un viejo lobo de mar, cuentan con uno de los mejores planteles del país, en el que destaca el goleador Humberto Suazo. Tigres, por su parte, está en pleno proceso de renovación, y para eso ha confiado el plantel en Daniel Guzmán, uno de los técnicos más exitosos en los últimos años.
Tras cuatro jornadas disputadas, ambos equipos registran el mismo balance de siete puntos y, desde hace días, no se habla de otra cosa en la ciudad más que del partido del sábado, que volverá a mezclar pasión y color, como lo ha hecho durante ya 35 años.