México se encuentra de luto por el sensible fallecimiento de Chespirito, quien perdió la vida este día a la edad de 85 años, en Cancún, Quintana Roo. El América pierde a uno de sus más grandes seguidores.
La confirmación del deceso fue dada a conocer por Televisa, empresa para la que trabajó gran parte de su vida.
Hasta el momento se desconoce mayor información de su deceso.
La relación de Roberto Gómez Bolaños con el futbol es incalculable, pues en gran parte de sus programas se hablaba del América, del Necaxa y de otros equipos que en su momento figuraron en el futbol mexicano.
Fue tal su pasión por el futbol que en 1978 decidió realizar la película de ‘El Chanfle’, la cual se estrenaría 1 año más tarde y cuya temática sería netamente futbolera, pues él daba vida a un torpe, pero carsimático utilero del Club América.
Una de las escenas más recordadas de esta cinta es la que se da cuando ‘El Chanfle’ imagina que es el jugador estrella del club América y cuando ingresó a la cancha del Estadio Azteca para buscar que el árbitro lo expulsara, pues su esposa estaba dando a luz en esos momentos y tenía que salir corriendo para estar presente en el parto.
Las cosas que Chespirito le dejó al FUTBOL
1.- Una pasión indescriptible por el América, el equipo de sus amores. Cada campeonato de las Águilas lo celebraba como si él hubiera estado en la cancha.
2.- Un legado en los jugadores. El delantero chileno, Sebastian Chamagol González, celebró incontables goles con el Atlante homenajeando al Chavo del 8, su personaje favorito de Chespirito. Otro es Neymar, que en una ocasión fue fotografiado con un disfraz del Chapulín Colorado.
3.- Una entrañable amistad con los dos más grandes futbolistas de la historia: Diego Armando Maradona y Edson Arantes do Nascimiento, Pelé.
4.- Dos películas casi de culto para los mexicanos: El Chanfle y el Chanfle 2, en las cuales se trata la vida de un simpático utilero del Club América.
5.- Tenía tanto impacto en Sudamérica, que durante el Mundial Brasil 2014, los aficionados del Scratch du Oro llenaban sus estadios disfrazados con los personajes de Chespirito.
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